Casa-estudio,
Helsinki, Finlandia
Alvar
Aalto y Aino Mario. 1934 – 1936
Harry
Gullichsen, empresario maderero, y su esposa la pintora Maire
Ahlström conocen a los Aalto en 1935, ocasión en que aquellos
deciden realizar una galería de arte dedicada a las vanguardias. Al
año siguiente hallamos a Aino dedicada al diseño de los interiores
de la casa de los Gullichsen ubicada en Helsinki; el doble juego de
proyectar los ambientes de otros y el suyo propio.
El
estar de la casa Aalto, expone, como el resto de los locales, aquel
impulso de “hacerlo todo”. El equipamiento que se ajusta a las
paredes, los objetos sueltos que van poblando el lugar, y se van
adecuado a cada uno de los rincones para hacer mas agradable la vida.
“Una
silla debería cumplir de un modo razonable toda una serie de
requisitos en armonía, no debe ser estridente en su diseño, tampoco
debe ser inadecuada en términos de absorción de sonido, etc. Una
pieza en contacto íntimo con el hombre no debe estar hecha con
materiales muy conductores del calor como los metales”. Alvar
Aalto, conferencia Racionalismo
y hombre. En la reunión
anual de la Sociedad Sueca de Arte y Diseño. Mayo de 1935